NADIE PUEDE PERDER LO QUE NUNCA HA TENIDO
1 Juan 2:19Reina-Valera 1960 (RVR1960)
19 Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros.
Tengo toda una vida en el Evangelio de Cristo, y al paso de lo años sigo encontrándome con cristianos que creen que la salvación se pierde, y otros que defienden rotundamente que no se pierde. Este tema es una de las muchas doctrinas, que forman parte de los principios bíblicos que todo creyente debe saber. La Biblia, despeja toda duda sobre este interesantísimo tema sobre si la salvación se pierde, o no. Disertación de este fascinante tema:
1. Si peco, ¿perderé mi Salvación?
2 Corintios 5.21: “Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.”
……Es importante comprender bien este versículo de la Biblia. Este versículo habla de Jesucristo, el único que no conoció pecado en su condición de hombre. Él tuvo que cargar sobre sus hombros, el pecado de todos nosotros; para que por medio de su sacrificio fuésemos hechos
justicia de Dios en Él. Partiendo de este versículo, podremos a través de las Escrituras llegar a comprender que la salvación no se pierde en si misma; a no ser que el creyente la abandone. Nadie, merecemos, o merecíamos recibir la salvación por medio de Cristo.
justicia de Dios en Él. Partiendo de este versículo, podremos a través de las Escrituras llegar a comprender que la salvación no se pierde en si misma; a no ser que el creyente la abandone. Nadie, merecemos, o merecíamos recibir la salvación por medio de Cristo.
Juan 6. 39: “Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.”
Este versículo es especifico, y contundente en el poder entender este tema. Dice la palabra, para que de todo lo que me diere, no pierda yo nada. Este solo versículo refleja dos verdades irrefutables por el hombre:
a) Para que de todo lo que mi Padre me dio no pierda Yo nada
b) Yo le resucitare en el día postrero
……¿Cómo se podría tergiversar este versículo si habla por si mismo? No hay que predicarlo, se predica solo. Con toda claridad la Biblia dice: para que de todo lo que mi Padre me de, no se pierda nada. Ahora bien, este versículo termina afirmando que el deseo de Dios y el Hijo, era, y es, el que no se perdiera nada. Y así, los salvos seremos resucitados juntamente con Él en el día postrero. El día postrero, se refiere al privilegio de morar con Él por la eternidad. Si no existiera base bíblica, que confirmara tal posición respecto a que la salvación no se pierde; entonces se echaría por la borda dicha disertación. Mas la palabra de Dios, especifica con toda claridad que la salvación no se pierde; si no que es hasta es segura para el creyente nacido de nuevo. No así, para el que menosprecio la salvación. La palabra de Dios declara que muchos son los llamados; pero pocos son los escogidos. ¿Y quienes son los escogidos? Los que desde antes de nacer Él conoció, a estos tales predestino y también los llamo; con el propósito de glorificarlos para vida eterna. ¿Será que la salvación fue decretada por Dios para toda persona? Esta pregunta según me guía el Espíritu Santo, es el meollo de este tema; y que se responderá al final. Nunca, nunca, se puede predicar una doctrina basada en uno solo versículo bíblico; tal doctrina es producto humano y no de Dios. Toda doctrina bíblica, es apoyada y respaldada por la Biblia con varios versículos bíblicos, temas bíblicos, o historias bíblicas según aplique, etc.
2. Predestinados para vivir eternamente con Dios
……Romanos 8. 29-30: “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. 30Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.”
Cuatros puntos de importancia que arrojan estos versículos:
a) A los que antes conoció los predestinó
b) A los que predestino los llamo
c) A los que llamo justifico
d) A los que justifico los glorifico .
1. a) A los que antes conoció los predestino
……Es fascinante entender este versículo. El haber sido predestinados, nos da la garantía de pertenecerle a Cristo. Pero mas aun es una bendición, comprender que le pertenecemos por voluntad de Él, quien nos conoció desde antes de nacer. Ahora veamos bíblicamente que Dios nos conoce, y escogió desde antes de nacer.
Jeremías 1. 5: “Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.”
……La Biblia, nos refleja en este versículo acertadamente, la posición de ser conocidos por Dios desde que estamos en el vientre de nuestra madre. Podemos confirmar que somos conocidos por Dios desde antes de nacer según la Biblia; para después ser predestinados. Jeremías fue predestinado con propósito divino, siendo conocido por Dios desde antes de nacer. Es imprescindible, comprender el concepto de haber sido predestinado. Tal regalo de Dios, no es una decisión tomada por el hombre. Dios predestino a los que desde antes de nacer, ya Él conocía. En lo personal, me apasiona poder comprender esto. Porque puedo ver con toda claridad, que desde antes de nacer Él ya me conocía, y que propósito de Dios había para mi. Todo creyente debe entender este principio bíblico, es importantísimo. Desde antes de haber nacido, ya Dios te conocía; y propósito divino hay para ti.
2. b) A los que predestino los llamo
1 Pedro 2.9: “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.”
……Observemos que el apóstol Pedro, hace referencia a que hemos sido escogidos con propósito. Así como Jeremías fue conocido por Dios desde antes de nacer; este había sido predestinado a servir a Dios. Jeremías fue llamado por Dios, para servirle en el ministerio profético. Y es que a los que Dios conoció, también los predestino para que fuéramos sus siervos.
3. c) A los que llamo justifico
Romanos 4.5: “Mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia.”
……¡Alabo tu nombre Padre!, gracias por revelarte por medio de tu palabra. Este es uno más de los versículos que declaran que la salvación procede de Dios; no siendo producto de buenas obras, sino del haber sido predestinado para salvación por medio de Su justicia. Habiendo sido desde antes conocidos por Dios, fuimos predestinados para ser salvos no por nuestras obras; sino por el haber sido justificados gracias a la sangre de Yeshua que nos justifica ante el Padre para salvación.
4. d) A los que justifico los glorifico
Juan 8.54: “Respondió Yeshua Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios.”
Observemos que a la luz de las Escrituras, Dios Padre glorifica al Hijo; y por medio del Hijo los suyos son glorificados. Porque fuimos conocidos por Él desde antes de nacer con sello de predestinación; llamados a servirle para después ser glorificados en Cristo Yeshua.
3. ¿Por qué muchos son llamados, y pocos son los escogidos?
Mateo 22. 14: “Porque muchos son llamados, y pocos escogidos.”
…..Como podríamos explicar que todos son llamados a ser salvos; si este versículo con toda claridad declara que muchos son los llamados, pero pocos son los escogidos. La respuesta, esta en el haber sido predestinados; según las Escrituras: Romanos 8: 29-30. ¿Si todos hubiesen sido llamados a ser salvos, entonces a que vino Yeshua a morir en la Cruz del Calvario, si todo íbamos a ser salvos? ¿Para que llamar a muchos, y después escoger solo a pocos? La respuesta esta en que, muchos son los llamados pero, la Biblia no dice que todos son llamados por Dios. Según las Escrituras, los que son llamados por Dios, fueron conocidos por Él desde antes de nacer; y a estos los predestino para vida eterna. La Biblia no dice, que a todos Él predestino. Tampoco dice que a todos Él llamo. Y menos aun dice que a todos Él escogió. ¿Será que la salvación fue decretada por Dios para toda persona? La Biblia se predica sola, siempre lo he dicho; y lo diré hasta que Dios me lo permita. Nosotros, sus siervos (as), solo somos un vaso en Sus manos; es Su palabra quien se revela al hombre para salvación. Al final, la respuesta a la pregunta pendiente.
a) ¿El pecar nos lleva a perder la salvación?
1 Juan 2.1: “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.”
……Consideremos varios puntos al respecto: En primer lugar, la Biblia la boca de Dios; nos exhorta a no pecar. A partir de allí, la responsabilidad de pecar recae en el creyente que decide pecar únicamente. No hay posibilidad alguna de culpar a otros por el pecado que aqueja al creyente que peco. Ahora bien, si dijéremos que la salvación se pierde; erraríamos en la sana doctrina. Pues la salvación en si misma no se pierde, sino es el creyente
quien la suelta, o desvaloriza, al decidir caminar en sus propios caminos. Así mismo, decir que se pierde la salvación por pecar; es otro error doctrinal. La salvación, es un regalo de Dios inmerecido; y el tal es imperecedero. La salvación no es una cosa, y menos una sustancia. Aquellos que reciben el llamado de salvación de parte de Dios, y lo obedecen; reciben a cambio el regalo de la salvación. Dicho regalo, nadie puede arrebatarlo de las manos de quien lo recibió; porque no lo recibió por un hombre, sino por Dios mismo. Dicho regalo en mención, fue comprado a precio de sangre. Cuando usted compra algún regalo para dárselo ha alguien, este tendrá un tiempo de utilidad y llegara a su termino final. Pero el regalo de la salvación es imperecedero, porque se compro a precio de sangre; y la sangre de Yeshua es indeleble. Ni el mismo Satanás, puede arrebatar la salvación a un creyente en Cristo; mientras este no la desvalorice y no la suelte es bíblico. Y aun si el creyente llega ha no darle el valor que merece la salvación, y la dejara de lado. El regalo de la salvación, no perecerá, ni perderá valor alguno; sino por el contrario Dios que no es hijo de hombre para arrepentirse; no tomara para si mismo de nuevo el regalo de la salvación. Sino que Su deseo siempre será, que el creyente tibio vuelva su rostro a Dios, valorizando el precio que Él pago por ese regalo; y tomándolo de nuevo vuelva al Camino del quien lo salvo.
![El don del la Salvacion](https://i0.wp.com/lourdesrangel.com/sitio/wp-content/uploads/2012/12/imagesCAW5SLBZ.jpg)
Todos hemos pecado después de haber sido perdonados por Yeshua, y adoptados por el Padre. Aquel que diga que nunca peca, pues a Dios esta siendo mentiroso y la verdad no esta en el: “Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.” 1 Juan 1.:10.
Ahora bien, si la salvación se perdiere por pecar; el sacrificio de Yeshua hubiese sido en vano. ¡Si la salvación se perdiere por pecar, pues estaríamos todos perdidos! Una cosa es pecar y arrepentirte; y otra es vivir en pecado deliberadamente. Bendito sea Yeshua por su sacrificio. ¡Ahora somos libres, y todo gracias a Su Gracia! La salvación no perece con el tiempo. El pecado no hace desaparecer el regalo de la salvación. Es el creyente que insiste en pecar el que terminara perdiendo su salvación; por su propia voluntad. Perderá la salvación porque nunca nació de nuevo; pues quien ha sido predestinado por Dios, teme a Dios y sigue Sus pisadas.
El creyente que peca, arrepentido vuelve su rostro a Dios, y dándole la espalda al pecado, sigue el Camino correcto. No así, los que caminan dentro del Camino; pero ellos van caminando en su propio camino. Observemos las palabras sabias de nuestro salvador Jesucristo.
b) ¿Bíblicamente se justifica el pecado en los creyentes?
Juan 15.22: “Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa por su pecado.”
……El conocer los preceptos de Dios, nos excluye del poder excusarnos ante el pecado. Yeshua predico diciendo: que si el no hubiera venido, y no hubiese predicado en este mundo, no habría culpabilidad de pecado sobre el hombre. Mas como Yeshua vino y predico con palabra y hechos, no queda más escusa para pecar. No hay excusa alguna para justificar el pecado ante los ojos de Dios; y menos de los hombres. Lo dijo Yeshua. no yo.
Juan 8. 34: “Yeshua les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.”
Yeshua asevero algo contundentemente muy serio: “quien peca es esclavo del pecado”. Cabe preguntarnos ahora: ¿los creyentes pecan? ¿Son todos los cristianos ejemplo de fidelidad a Dios? Las respuestas son:
1. Todos los creyentes pecan, y el que dice que no peca; a Dios hace mentiroso. La Biblia dice que aquel que dice que no peca, llama mentiroso a Dios. ¿Por qué es que llamamos mentiros a Dios si decimos que no pecamos? Porque desde que nacimos hemos sido concebidos en pecado. Salmos 51. 5: “He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre.”
El apóstol Santiago declaro: “y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.” Santiago 4.17.
Hasta un neófito, puede entender este versículo. El no hacer lo bueno, sabiendo hacerlo, se peca. Si la salvación, se perdiera por pecar, ya nadie tendríamos la salvación segura; porque todos pecamos aun por el solo hecho de saber lo bueno y no hacerlo. La salvación no se pierde, le guste o no ha Satanás, el enemigo frustrado y vencido en la Cruz del Calvario por Yeshua. La salvación es un regalo recibido por gracia de Dios. Quien acepta el llamado al arrepentimiento no solo valora la salvación, sino que además la retiene.
4. ¿Qué hay de los que pecan deliberadamente? ¿Qué refleja aquel creyente en Cristo, que sus palabras dicen una cosa; pero sus obras contradicen sus palabras?
……Hebreos 6.1-9: “Por tanto, dejando ya los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección; no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, de la fe en Dios, 2de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. 3 Y esto haremos, si Dios en verdad lo permite. 4 Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, 5 y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, 6 y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndola a vituperio. 7 Porque la tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella, y produce hierba provechosa a aquellos por los cuales es labrada, recibe bendición de Dios; 8 pero la que produce espinos y abrojos es reprobada, está próxima a ser maldecida, y su fin es el ser quemada. 9Pero en cuanto a vosotros, oh amados, estamos persuadidos de cosas mejores, y que pertenecen a la salvación, aunque hablamos así.”
Aquellos que han experimentado la gracia redentora de Dios, es muy difícil que vuelvan a tras. Sin embargo es bíblico, que muchos vuelven atrás, a sus propios caminos. Lo más lamentable es que esto ha sucedido en muchas personas. Y seguirá sucediendo por falta de temor a Dios. Ahora bien, ponga atención: en este versículo, se expresa una singular forma de personas. No esta hablando de creyentes convertidos, que cayendo en pecado se arrepienten y vuelven su rostro a Dios; y por ende restaurados por Dios. Las Escrituras denotan una palabra clave: recayeron. Es decir, personas que por voluntad propia deciden darle la espalda a Dios, después de varias recaídas. Ojo, hay quienes dicen, que nadie que realmente se haya convertido puede volver a tras. El autor del libro de los Hebreos, no lo expresa así. Las Escrituras dicen, porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento. Veámoslo más a fondo una parte, la otra parte la explico mas adelante:
* Se habla de creyentes que recaen en pecado
* Se habla de que es imposible salir de donde cayeron
* Se habla de cómo quien recae en pecado expone en vituperio en el nombre de Yeshua. .
1. a) Se habla de creyentes que recaen en pecado
Hebreos 6. 6:” Y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento”.
……Creyente que ha nacido de nuevo en Cristo Yeshua, no lo vera usted recaer en pecado. Llevo toda una vida en el Evangelio de Cristo. Me rijo según la palabra de Dios, y he visto su veracidad en mí caminar con Cristo. Aquel que ha sido predestinado por Dios para ser salvo, puede que caiga en pecado; pero este viene delante de Dios arrepentido pidiendo perdón, y no vuelve a cometer aquel pecado. No así, quien no ha nacido de nuevo; quien no solamente cae, sino que recae en el pecado. Quien ha nacido de nuevo teme a Dios, y le da la espalda completa al pecado. Creyente que no ha nacido de nuevo, le da la media espalda al pecado no completa. Creyente que ha nacido de nuevo, valora la salvación como lo más preciado en su vida. Quien no ha nacido de nuevo, sus obras, sus frutos, y sus hechos, evidencian su poco, o nulo temor a Dios.
a) ¿ El creyente nacido de nuevo, llego al Camino por voluntad de Dios?
……Quien ha nacido de nuevo, llego a Yeshua por medio de Dios, no por el mismo. Y como no llego por el mismo, no puede regresarse por si mismo. Pues aun si pecare, el Espíritu Santo le redarguyera de pecado, y lo restaurara. Biblia: “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.” Juan 6:44.
Juan 6.45: “Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí.”
……Dice la palabra de Dios que ninguno, llega a Yeshua por si mismo; sino que el Padre, lo lleva a los pies del Hijo; y es el Hijo quien le entrega el regalo de la salvación. Yeshua murió en la Cruz del Calvario por nuestros pecados, el precio que pago fue caro, a precio de Sangre. Y Su sangre redime al pecador. La salvación redentora por medio de Yeshua, nadie la pueda arrebatar de quien la recibió. Por otro lado, quien llega al Hijo por el Padre, no puede regresarse, ni lo quiere tampoco. Porque para llegar al Hijo, antes se fue enseñado por Dios. Para cuando llegamos al Hijo, ya hemos sido adiestrados por Dios Padre; y por ende al presentarnos a Yeshua caemos rendidos ante Él. Una vez que se conoce el amor, el perdón, el sacrificio de Yeshua, la salvación, y la gracia de Dios que abarca mucho; ni se puede regresar para atrás, ni se desea regresar apara atrás.
b) Evidencia clara de un nacido de nuevo
Juan 10. 27-30: “27Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, 28y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. 29Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 30Yo y el Padre uno somos.”
……Un nacido de nuevo, que llego a los pies de Cristo por el Padre, no solo termina enamorado de Su salvador; sino que es conocido por Yeshua. Los oídos espirituales de un creyente nacido de nuevo, son sensibles a la voz de Su Amo. Quien no llego al Hijo por el Padre, llego solo. La oveja de Cristo, reconoce la voz de Su pastor y lo sigue. La oveja que camina entre el resto de las ovejas y llego sola; camina para donde le da la gana. Peca, y recae en pecado sin arrepentirse, porque sus oídos no son sensibles a la voz de Yeshua. No son sensibles, porque no conocen al Pastor de las ovejas. El Pastor de Pastores, reconoce a sus ovejas, y estas le conocen.
c) Se habla de que es imposible salir de donde cayeron
Hebreos 6.4-6: “Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, 5y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, 6y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento.”
Quienes recaen, ojo, no dice caen; es imposible que sean otras vez renovados para arrepentimiento. Que significa esta base bíblica importantísima:
1. Imposible es volver a ser renovados para arrepentimiento cuando se ha recaído en pecado. Imposible bíblicamente. Se especifica que se refiere a los que recaen en pecado. Recaer no lo es lo mismo que pecar, arrepentirse, y regresar a la senda antigua. Quien recae en pecado. Puede seguir caminando dentro de la iglesia, pero no caminando por el Camino. Juan 14. 6: “Yeshua le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.”
2. Fueron participes del Espíritu Santo. Significa, que evidenciaron Su poder.
Fueron iluminados del don celestial. ¿Qué significa don celestial, que es ese don? El don celestial, es el don de la salvación: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios.” Efesios 2:8. Concluyendo que a pesar de haber gustado del Espíritu Santo y del don celestial; aun así bajo su voluntad le dieron la espalda a Dios. Aquí es cuando se ha caído en apostasía. Siguen caminando dentro de la iglesia, pero no caminan en el Camino.
3. Gustaron de la palabra de Dios, y aun así la menospreciaron. Nótese que dice que gustaron, que no es lo mismo que convicción. He conocido a muchas personas decir, que van a la iglesia porque les gusta algo en ella; pero no por convicción a la palabra de Dios. El libro de hebreos, claramente dice gustaron, es decir, personas que llegaron gustar de la presencia de Dios, de la palabra de Dios, y de la bendición de la salvación; pero nunca terminaron siendo convertidos. Convertido, no lo es mismo que convencido. El convencido se mueve por emociones, por lo que le gusta, por lo que ve. El convertido, sigue a Yeshua porque esta convencido por el Padre quien lo llevo al Hijo. ¡Aleluya!
……Todas las características mencionas, describen a una persona que camino por el Camino; pero que descuidando su salvación salio del Camino. Esto es una clara evidencia bíblica, de que una vez que se cae en este estado llamado apostasía; es imposible volver atrás. La pregunta a formularnos es la misma desde el principio: ¿Será que la salvación fue decretada por Dios para toda persona? ¿Se pierde la salvación? La salvación no se pierde, ya quedo explicado en líneas anteriores. El problema es, que no todos los miembros de una iglesia son nacidos de nuevo. El que ha nacido de nuevo, camina en el temor de Dios. Quien no ha nacido de nuevo, recae en pecado por que no ha nacido de nuevo. No reconoce la voz del Pastor, y el Pastor de las ovejas tampoco los reconoce.
d) Se habla de cómo quien recae en pecado expone en vituperio en el nombre de Yeshua.
Hebreos 6.6: “Y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio.”
……La palabra de Dios lo deja muy claro: no puede, es mentira, es imposible bíblicamente; que un creyente que ha recaído en pecado pueda ser restaurado por Dios. Lo dice la Biblia, no yo. De allí, que andan muchos engañadores por el mundo. Falsos líderes, que han recaído en pecado una y otra vez, y resulta que Dios los ha restaurado. Yo no encuentro que la Biblia diga eso. Dios puede, y quiere, y restaura al caído; pero no al que se la pasa recayendo una y otra vez sin temor de Dios. Cuando se ha llegado a tal punto, tres cosas son las que pudieron haber sucedido:
- Apostato contra Dios, aunque siga dentro de la iglesia.
- No había nacido de nuevo.
- No llego a Cristo, porque el Padre lo llevo.
Vamos concluyendo esta primera parte de esta serie: Salvos por Yeshua
……Una persona que fue salvo, apostato, y le ha dado la espalda a Dios; por ende perdió su salvación. No que la salvación se pierda para el creyente nacido de nuevo. La salvación no se pierde, para aquel que llego al Hijo, porque el Padre lo llevo. La salvación no se pierde, porque es de valor imperecedero: Real Academia Española lo explica así: “Que no perece, que es inmortal, que es eterna.”
Sobre los que han caído en apostasía, la gente aludida aquí, no son arrepentidos; sino apostatas. Es decir, no solo han caído en pecado, sino que en ves de volverse a Yeshua arrepentidos de sus pecados, deciden mejor apartarse para siempre de Él; fingiendo tener a Dios en sus vidas, pero con mascara. Continúan sus vidas como si no hubiera pasado nada, siguen con el ministerio sin remordimiento alguno, etc. Vituperaron el nombre de Yeshua como cualquier cosa: “¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?” Hebreos 10.:29.
……* Ponga atención, el autor del libro de los Hebreos dice: la sangre del pacto en el cual fue santificado. ¡Se da cuenta, que la salvación es para todos los llamados; pero no todos la valoran! Este versículo refleja que se puede llegar a ser santificado por la sangre de Cristo; y después darle la espalda al que lo había santificado. ¡Cuánto mayor castigo pensáis que recibirá el que así produce!
El problema que surge aquí, es que ya decidieron darle la espalda a Dios, esa fue su decisión; el problema son las almas que los van siguiendo. Con apariencia de piedad engañaran a muchos.
La salvación en si misma no se pierde, somos nosotros lo que le damos la espalda a la salvación. Por ende, la salvación se pierde dependiendo la voluntad del hombre, no la voluntad de Dios. La voluntad de Dios es que nos arrepintamos de nuestros pecados, y volvamos arrepentidos el rostro a Dios. Es el hombre el único responsable de no prestarle la debida importancia a la salvación. El regalo de la salvación es imperecedero, y valorado por el creyente nacido de nuevo. Mientras que el falto de entendimiento, desecha la gracia de la salvación como cualquier cosa.
……La salvación es imperecedera repito. Si un alma llego a los pies de Yeshua por el Padre, valorara la salvación, la cuidara, la sustentara, porque entiende que no la merecía; y que no la obtuvo por logros propios, sino que la recibió de Su salvador gratuitamente. Quien fue predestinado por Dios, sabrá valorar la salvación como lo más valioso en su vida. He conocido personalmente personas que un día vivieron una vida en abundancia espiritualmente; en donde experimentaron el poder del Espíritu Santo. Mas cuando la prueba difícil llego a estas personas, en ves de volverse a Dios y aferrarse a sus promesas; simplemente dejaron para siempre a Yeshua. Al paso del tiempo nos dábamos cuenta, como esas personas por más que tratábamos de convencerlas de volver al Camino; nunca se arrepintieron cayendo en apostasía. Una vez que se cae en esta condición, el creyente caído no vuelve atrás. Puede que aparente ante los demás lo que no es. Pero la Biblia es bien clara, y dice: ” Así que por sus frutos los conoceréis.” Mateo 7:20
.5. ¿Será que la salvación es para todos?
2 Pedro 3.9: “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”
……Respondiendo bíblicamente la pregunta inicial: Es el deseo de Dios, que todos procedan al arrepentimiento; pero no todos proceden al arrepentimiento. Muchos son los llamados, pero pocos son los escogidos; porque no todos los miembros de una iglesia han llegado al Hijo por medio del Padre. Es el deseo de Dios que nadie perezca, pero no todos responderán al llamado. Es el deseo de Dios que todos sean salvos según las Escrituras, pero no todos valoran la salvación. La Biblia concluye la primera parte de esta serie:
Ezequiel 3. 11: “Diles: Vivo yo, dice el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva.”
Juan 3.16: “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna.” La salvación es gratuita, pero condicionada a creer en Dios y Su Hijo por medio de la fe. Respecto a: “para que todo aquel que en él cree no se pierda.” No todas las personas creen en Dios, pues la fe no es de todos bíblica mente.
Resumen: ¿Se pierde la salvación? No, es imperecedera en sí misma. ¿Es el deseo de Dios que todos sean salvos? Si, pero no todos lo serán según la Biblia. 2 Tesalonicenses 3.2: “Para que seamos librados de hombres perversos y malos; porque no es de todos la fe”. Si la salvación no la pudiera perder un creyente, como explicaríamos, Hebreos 6.4-6: “Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, 5y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, 6y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento.” Estos versículos, claramente expresan la vida de un creyente que había gustado de la palabra de Dios, y había sido participe del Espíritu Santo, y vuelve atrás en pos de sus propios caminos. La salvación en si misma no se pierde, es imperecedera; es el creyente quien retiene o deja de lado la salvación. Por otro lado, el libro de Apocalipsis 3.5, declara: ” El vencedor será vestido de vestiduras blancas, y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles”. Si Dios borra, y borrara el nombre de quienes no caminen en su temor y santidad, es obvio que se refiere a un creyente que había sido salvado, pero que descuidando su relación con Dios, perdió su salvación; y por ende su nombre fue borrado por Dios. Al salir del Camino, para andar por otro camino, se pierde la salvación. No que la salvación se pierda en si mima; sino que la pierde el que la desvalorizo.
“¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron.” Hebreos 2:3.
Un creyente nacido de nuevo, cuidara en no errar en descuidar su salvación; por ende no vuelve a las sendas antiguas, sino que prosigue diariamente en el Camino del Señor, en temor y santidad.
Dios te bendiga.
Hermano Carlos
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